viernes, 29 de febrero de 2008

¿Qué se debate en un debate?

El otro día, recibí un correo electrónico de un ex-alumno de Retórica. Me preguntaba qué pensaba del debate entre Zapatero y Rajoy y si alguno de los dos aprobaría la asignatura. Me ha gustado la pregunta, aunque no espero decir nada demasiado nuevo. Doctores tiene la Iglesia, y hay opiniones para todos los gustos.

¿Qué es un debate?

Empecemos por definir lo que vamos a tratar. No nos ayuda demasiado el Diccionario de la Real Academia:

Debate (De debatir). 1. m. controversia (‖ discusión). 2. m. Contienda, lucha, combate.

Sobre todo, si tenemos en cuenta que tampoco nos aclara nada acudir al hiperenlace de la controversia:

1. f. Discusión de opiniones contrapuestas entre dos o más personas.

Habrá que buscar otras fuentes, a ver si nos enteramos de algo. Por ejemplo, si nos vamos a la Wikipedia, leeremos:

El debate es un acto propio de la comunicación humana que consiste en la discusión acerca de un tema polémico —llamado premisa o moción— entre dos o más grupos de personas. Es de caracter argumentativo, y es guiado por un moderador. Los debates no los gana necesariamente quien tiene la razón, sino quien sabe sostener mejor sus ideas.

¿Quién configura el auditorio del debate?

Según esto, se trataría de una actividad de confrontación de ideas ante un público y con un mediador que pone paz. Es importante ver esto con claridad, ya que de ahí surgen unas cuantas cuestiones que no deberíamos dejar pasar:

  1. Hay dos personas que oponen sus puntos de vista, lo que implica que se busca la diferencia, no el acuerdo
  2. El auditorio de sus respectivos discursos no es el contrario, sino el público, lo que implica que:
    1. No se busca convencer al rival
    2. No es imprescindible prestarle demasiada atención
    3. No hace falta gastar tiempo en rebatirlo
  3. Es más importante mirar a la cámara que al contrario
  4. La imagen física debe ir asociada a los factores que definen la telegenia
  5. El objetivo de un debate es... no perderlo

¿Para qué sirve el debate?

Pensemos un poco:

  1. ¿Para llegar a un acuerdo con el otro? NO
  2. ¿Para convencer al otro? NO
  3. ¿Para convencer a tus incondicionales? NO
  4. ¿Para convencer a los incondicionales del otro? NO

Visto esto, me da la impresión de que el objetivo último del debate es convencer al corto número de personas que no tienen decidido su voto y que está esperando hasta ver cuál de los candidatos parece tener, no las ideas más claras, sino la mayor probabilidad de llegar a gobernar.

Esta matización debe ser contemplada como algo importante: no es convencer a los indecisos para que me voten; es convencerlos de que se va a ganar y, en consecuencia, hacer que voten por un simple prurito de utilidad.

Si esto es cierto, entonces habrá que pensar que el debate tiene la misma función que las cuñas informativas en las que se da información de un mítin, o que las vallas publicitarias, o que los medios de comunicación autoproclamadamente independientes, o que la propia campaña electoral: inclinar a los indecisos.

Corolario

El debate se gana luchando por el centro político o, mejor aún, por quienes depositan el voto menos ideologizado.

¿Qué veremos en el próximo debate?

No sabiendo si tendré tiempo de escribir otro post, apuesto por lo siguiente:

  1. Programa: en el primer debate, se centraron los dos en el análisis del pasado, lo que implica que guardan munición para el próximo lunes, y esa munición puede ser de dos tipos, supongo:
    1. Propuestas
    2. Descalificaciones, pero ésta es menos probable, toda vez que el que más insulte mostrará ser el más débil
  2. Imagen: pulirán los elementos que les achacaron como defectos, del tipo de mirar demasiado el cronómetro, usar un vestuario diseñado por enemigos, adoptar conductas demasiado agresivas, no dirigirse a la cámara cada vez que toque intervenir...

¿Quién ganó el debate?

Evidentemente, las cadenas de comunicación que lo retransmitieron (buenos ingresos por publicidad) y los medios que lo van glosando, que así consolidan a su público y aumentan la percepción de seriedad que se tiene de ellos.

...¡Ah! Que te refieres a qué candidato ganó, si Zapatero o Rajoy. Para gustos, colores.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por colaborar. Los comentarios del blog tienen que ser aprobados por mí antes de aparecer publicados. Por favor, ten un poco de paciencia y, si quieres, sigue echándole un vistazo a lo que hay por aquí. Saludos.